Trabajo con viticultores de todo el sur de Europa, desde Portugal hasta Italia. Esto representa cientos de miles de productores con cientos de variedades de uva diferentes y un enorme número de tipos de vino. Pero, más allá de las diferencias sensibles, hay una tendencia que lleva a buscar fermentaciones y, por tanto, levaduras que puedan desarrollar y potenciar los aromas típicos de la variedad de uva y de la zona de cultivo. En los vinos blancos, además de los aromas varietales, los enólogos buscan ramilletes de aromas frescos y sensaciones complejas de fruta fresca, cítricos y flores de primavera. En los tintos más jóvenes, buscan equilibrios entre las sensaciones de pequeños frutos rojos y especias diversas combinadas con un equilibrio tánico y de cuerpo. Todos mis clientes quieren crear un vino distinto de los demás y mi trabajo consiste en aportar soluciones e ideas diferentes para satisfacer sus necesidades. Podría hablarle de uno de mis clientes, hace unos años, que se quedó con vinos blancos que no se ajustaban a las peticiones modernas. Tras largas conversaciones y pruebas, consiguió cambiar su tipología, implantando una nueva tecnología de nutrición que combina SpringArom® y ViniLiquid™ y fermenta con la levadura SafŒno™ CKS102. Desde entonces, sus vinos ganaron varios premios en todo el mundo y me sentí orgulloso de ser una pieza de ese éxito.
VINO Y SU EVOLUCIÓN A LO LARGO DE LOS AÑOS ES UNO DE LOS EJEMPLOS MÁS INTERESANTES Y EXTRAORDINARIOS.